19 Nov ¿Qué es la auditoría financiera? 5 pasos para realizarla

La transparencia y la precisión en la gestión financiera son pilares en una organización que desea tener una credibilidad sólida. Es por ello que, se realizan las auditorías financieras, un proceso que permite evaluar la integridad de los estados financieros, proyectando confianza de cara a clientes, inversores y demás interesados.

Si deseas saber qué es una auditoría financiera y cómo realizarla adecuadamente en tu negocio, te invitamos a leer este artículo completo. ¡Empecemos!

¿Qué es una auditoría financiera?

La auditoría financiera es un proceso sistemático que se realiza por auditores financieros, quienes son profesionales independientes. Estos actores, se encargan de examinar y evaluar los estados financieros de una empresa para determinar si los datos son fieles a la realidad que atraviesa.

También garantizan que el manejo de la información financiera cumpla con los principios contables y las normativas legales vigentes.

Las auditorías financieras se caracterizan por la minuciosa revisión que realizan a los registros contables. Esto incluye la rectificación de transacciones financieras, políticas contables y sistemas de control interno de la organización.

En el proceso, los auditores financieros utilizan técnicas especializadas que permiten recopilar evidencia respecto a la transparencia de los datos. El objetivo de ello es presentar una opinión objetiva respecto a la integridad y veracidad de la información que registra la empresa.

Pero una auditoría financiera no se limita a la verificación de números y cálculos; también, implica la evaluación de la preparación de los estados financieros. Es decir que, revisa las políticas contables que se han instaurado en la compañía, su consistencia al aplicarlas y su reflejo en los estados financieros.

¿Cuál es la diferencia de una auditoría financiera de las demás?

Existen diversos tipos de auditorías en el entorno empresarial, como la auditoría operativa o la auditoría de cumplimiento. Estas que acabamos de mencionar, se centran en la eficiencia de las operaciones y el cumplimiento de la leyes y regulaciones.

Por su parte, la auditoría financiera se enfoca en la veracidad y fiabilidad de la información que se reporta en la gestión contable. El análisis de esta auditoría permite saber si la empresa es 100% transparente con los datos que entrega a las autoridades fiscales.

Objetivos principales de la auditoría financiera

Tener claros los objetivos de la auditoría financiera es fundamental para entender su importancia y así sacar su máximo provecho. En este espacio, te detallaremos cuáles son los principales:

– Detectar errores y fraudes: los auditores financieros deben buscar errores de todo tipo que puedan afectar la adecuada gestión financiera.

– Asegurar el cumplimiento de las normativas legales: una de las principales finalidades es asegurar el cumplimiento de las leyes y regulaciones normativas exigidas por las autoridades. Además, debe evaluar que efectivamente esas normas se apliquen en la preparación de sus estados financieros.

– Evaluar el sistema de control interno: los auditores financieros deben hacer énfasis en la efectividad de los controles internos de una organización. Esto, con la finalidad de prevenir y detectar errores o irregularidades en la información financiera.

– Verificar la exactitud de los estados financieros: es clave determinar si los estados financieros presentan una imagen fiel y de la situación financiera real. Esto implica evaluar los resultados de las operaciones y los flujos de efectivo.

– Prevenir riesgos financieros: ya que en la auditoría se examinan las operaciones financieras, es posible identificar riesgos potenciales que podrían afectar la estabilidad financiera.

– Asegurar consistencia en la aplicación de políticas contables: la aplicación y cumplimiento de las políticas contables es una empresa es una obligación en Ecuador. Las auditorías se encargan de que se cumpla esta normativa de manera permanente en la gestión financiera.

– Fomentar la transparencia corporativa: las auditorías financieras promueven una cultura de transparencia y responsabilidad en el manejo de información financiera. Algo esencial para la buena administración.

Tipos de auditoría financiera

Al momento de realizar una auditoría financiera es posible encontrar dos tipos: la auditoría financiera interna y la auditoría financiera externa. Acá te vamos a detallar cuáles son y cuál es su propósito:

¿Qué normativas contables debo seguir al realizar una auditoría financiera?

Cumplir las normativas contables y de auditoría que están vigentes en Ecuador y resultan altamente beneficiosas. En esencia, porque proporcionan referencias que ayudan a trazar una hoja de ruta que guía parte del procedimiento.

Además, al cumplir las normativas contables, aseguras mayor efectividad en la auditoria, lo que sumará calidad y consistencia. ¿Y cuáles son estas normativas que debes seguir? Ya te contamos cuáles son las más conocidas:

• Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF)

Son de las normas con mayor reconocimiento y a las que se han acogido la mayoría de países, incluyendo Ecuador. Estas normas determinan los principios para el reconocimiento, medición, presentación y revelación de la información financiera.

Su objetivo, es asegurar el entendimiento de la información financiera en diferentes países y contextos.

• Normas Internacionales de Auditoría (NIA)

Estas normas fuero emitidas por la Federación Internacional de Contadores (IFAC), y su función es proporcionar los lineamientos para la realización de auditorías financieras. Las NIA cubren aspectos clave de estos procesos su planificación, evaluación de riesgos, obtención de evidencia y elaboración de informes.

• Código de ética para profesionales de la contabilidad

El Consejo de Normas Internacionales de Ética para Contadores (IESBA), es quien emitió este código. Los principios éticos que establece son lineamientos que los auditores deben seguir para asegurar auditorías efectivas.

Dentro del código, se incluyen parámetros de integridad, objetividad, competencia profesional y confidencialidad.

• Normas de Contabilidad Generalmente Aceptadas (GAAP)

En algunos países, como Estados Unidos, se utilizan los GAAP locales. Los auditores deben estar familiarizados con los GAAP aplicables en la jurisdicción donde se realiza la auditoría.

• Normas de control de calidad

Establecen los estándares para el control de calidad en las firmas que realizan las auditorías enfocadas en la revisión de los estados financieros.

Documentación necesaria para hacer una auditoría financiera

Al momento de realizar una auditoría financiera es fundamental contar con los documentos necesarios. Para que asegures un proceso efectivo, te contamos cuáles son los documentos más comunes y relevantes:

– Estados financieros: deben incluir el balance general, el estado de resultados, el estado de cambios en el patrimonio neto y el estado de flujos de efectivo.

– Documentos fiscales: se trata de todas las declaraciones de impuestos y sus respectivos comprobantes de pagos de. También, deben estar los registros de retenciones y deducciones.

– Comprobantes contables: son todos los documentos que respaldan las transacciones, como facturas, recibos, notas de crédito y débito, etc.

– Contratos y acuerdos legales: son todos los documentos que datan los préstamos, alquileres, contratos y demás acuerdos que impactan las finanzas.

– Libros contables: son el diario, mayor y otros registros similares.

Pasos para realizar una auditoría financiera

1. Planifica la auditoría con precisión

En la planificación se definen los objetivos, alcance y procedimientos a seguir. Para ello, es importante considerar dos aspectos de gran relevancia, estos son:

– Definición de los objetivos y alcance: debes determinar qué quieres lograr con la auditoría; por ejemplo, confirmar la exactitud de los estados financieros o identificar posibles errores contables. Esto puede incluir todos los estados financieros o enfocarse en áreas específicas.

– Recopilación de documentos relevantes: es indispensable que cuentes con toda la documentación requerida. Así, ahorrarás tiempo y ayudarás a realizar una revisión minuciosa.

2.Evalúa los controles internos

Cuando hablamos de controles internos estamos haciendo referencia a las políticas y parámetros con los que cuenta una empresa. El objetivo de estas medidas es la precisión y confiabilidad de su información financiera.

En este proceso, debes evaluar esas políticas controles, con el objetivo de identificar áreas de mejoras y posibles riesgos. Para ello, es importante trabajar dos aspectos:

– Analiza los procedimientos internos: debes revisar los procesos contables y financieros con el objetivo de comprobar que hay exactitud y seguridad para la información financiera.
En este paso, puedes incluir procesos de aprobación de transacciones, conciliaciones bancarias y controles de acceso a los sistemas financieros.

– Identifica las áreas de mejora: al evaluar los controles internos, puedes identificar debilidades, en procesos de gran relevancia, como los administrativos y contable. Al hacerlo, aseguras la aplicación de acciones separación inadecuada de funciones o procedimientos de conciliación incompletos.

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3. Verifica la precisión de los estados financieros

En este paso, el objetivo es comprobar que los estados financieros reflejen correctamente la situación financiera de la empresa. Para lograrlo, se llevan a cabo diferentes pruebas y protocolos de verificación para asegurar la veracidad de los datos.

Algunos de las pruebas que puedes realizar son las siguientes:

– Revisa los balances y cuentas: examina los saldos de las cuentas y verifica que todas las transacciones estén registradas correctamente. Esto incluye los ingresos, gastos, activos y pasivos.
En la revisión puedes incluir el análisis de cuentas bancarias, deudas y activos fijos.

– Realiza pruebas de auditoría: en esta parte, puedes incluir la inspección física de activos, confirmación de saldos con terceros y pruebas de corte. Esto, con el fin de verificar que el registro de las transacciones sea correcto.

4. Documenta los hallazgos y errores

Dejar todo plasmado en documentos oficiales es la mejor manera de sacar el máximo provecho de la auditoría. ¿Y cuáles son estos documentos oficiales? Acá te detallamos cuáles son:

– Informe de auditoría: en este documento se exponen de forma detallada los hallazgos de la auditoría. En él, es ideal destacar las áreas de mejor, como puntos donde la información financiera no se presenta de forma precisa; o si los controles internos necesitan ser mejorados.

– Se deben dar recomendaciones claras: es importante que cada hallazgo vaya acompañado de una recomendación práctica. Así, la empresa podrá implementar acciones para mejorar sus prácticas contables y financieras.
A futuro, estas recomendaciones ayudarán a evitar errores, mientras fortalece su sistema de control interno.

5. Implementa el seguimiento y las mejoras

La parte final de una auditoría financiera, y de todo proceso exitoso, es el seguimiento riguroso. Al hacerlo, se asegura que se implementen las mejoras recomendadas y, que en efecto, se optimice la gestión contable y financiera.

En este paso, es ideal trabajar de manera colaborativa con el equipo contable y financiero. Esto, ayudará a que las acciones correctivas se implementen. Al mismo tiempo, se pueden trabajar mejoras en los controles internos y capacitar a todo el personal.

¿Cuáles son los principales errores a evitar al auditar?

En todos los procesos que se ejecutan en una compañía, se corre el riesgo de que ocurran errores; sin embargo, siempre se pueden reducir. Para ello, es clave tener un conocimiento detallado de lo que se va a realizar, así puedes anticipar cualquier contratiempo.

Además, existen ciertos aspectos que pueden ayudarte a prevenir y prepararte; estos son:

– La falta de planificación: al no tener una planificación adecuada, se corre el riesgo de que la auditoría quede incompleta o no se enfoque en los aspectos relevantes. En consecuencia, se perderá todo el proceso y los recursos invertidos.

– No realizar la debida documentación: cuando no documentas adecuadamente los hallazgos y recomendaciones, dificultas el seguimiento e implementación de las mejoras.

– No aplicar los controles internos necesarios: los controles internos son esenciales para la confiabilidad de los estados financieros. Cuando no rectificas su adecuado cumplimiento, es posible que se pasen por alto problemas en los datos financieros.

– Omitir pruebas o hallazgos de la auditoría: todas las pruebas recolectadas en la auditoría son fundamentales para confirmar la precisión de la información financiera. Saltarse estos procedimientos o realizarlos de manera incompleta puede comprometer la calidad de la auditoría.

– No hacer el debido seguimiento: asegurarse de que se implementan las recomendaciones ayudará a corregir problemas; cuando no se implementan los errores van a persistir y pueden empeorar. Al hacer el debido seguimiento, garantizas que la auditoría cumpla su propósito y contribuya a la mejora continua de la empresa.

Ahora ya tienes claro todo lo que respecta a una auditoría financiera. Recuerda que, si deseas continuar aprendiendo de temas similares, puedes suscribirte al blog de Siigo Contifico. Solamente debes suscribirte llenando el formulario que encuentras aquí abajo.